lunes, mayo 30, 2005

La llegada de la cigüeña anuncia el verano



De la misma forma que el inicio de la primavera lo marca de manera y forma oficial El Corte Inglés, el verano de verdad no empieza hasta que Ana Obregón saca a relucir ese cuerpo de cigüeña en las playas de Mallorca y se reboza en la orilla ante la mirada atónita de los fotógrafos.


"(Imagen invertida.) Me escandalizo cada vez que oigo hablar de respeto a la intimidad y de derecho a la vida privada. ¡Encima¡ Por lo visto, se ve como un pecado de la vida pública la indiscreción que fisga y saca a la vergüenza de la calle hasta los últimos reductos de lo particular. El privatismo dominante ha lesionado la mirada misma, que ya sólo es capaz de adoptar el punto de vista del particular, compadeciéndose de la gran diva acechada y perseguida por el tenaz teleobjetivo de la prensa del corazón hasta en su más recoletas cotidianidades. Pero, vistas las cosas socialmente, ¿quién es realmente el invadido y quién el invasor? Basta pasar por un quiosco de periódicos para advertir el impudor y la osadía con que la vida privada ha tomado por asalto los medios de comunicación e invadido y ocupado con sus obscenas huestes el interés del público. Y para mayor escarnio, todos comprenden que la ley persiga la divulgación de intimidades contra la voluntad de los particulares afectados, pero levantarían el grito al cielo si se atreviese a restringir la divulgación de asuntos semejantes, no por respeto a la privacidad individual, sino por el decoro de la vida pública y en beneficio de sus intereses. La lente de una mentalidad privatizada ha invertido la imagen misma del fenómeno, pues la verdad social es que la vida pública es el agredido, y la vida privada, el agresor."

Rafael Sánchez Ferlosio - Vendrán más años malos y nos harán más ciegos