Insultantes campañas electorales
.
"Puestos los pros y los contras en la balanza, he decidido que el actual documento constitucional no me satisface lo suficientemente como para votar a favor, pero no es tan espantoso como para votar en contra. Conclusión: voy a ejercer la tan infravalorada práctica de… la abstención.
Si. Ya se que algunos (engañados por esos “sabios” que durante la noche electoral nos anuncian que la elevada participación es un triunfo de la democracia) me dirán que la abstención es una actitud poco democrática. Pero a todos ellos les recordaré que, a diferencia de las dictaduras comunistas, en las democracias liberales el voto no es una obligación sino un derecho. El derecho a no estar de acuerdo con ninguna de las opciones. El derecho a decirle a esa clase política que incumple sistemáticamente todo lo que promete, que va a tener que hacer las cosas de otra manera si quiere ganarse mi voto.
Mi abstención no es una falta de interés por Europa."
Xavier Sala - La Vanguardia
Si le interesa, lea el artículo completo aquí
"Puestos los pros y los contras en la balanza, he decidido que el actual documento constitucional no me satisface lo suficientemente como para votar a favor, pero no es tan espantoso como para votar en contra. Conclusión: voy a ejercer la tan infravalorada práctica de… la abstención.
Si. Ya se que algunos (engañados por esos “sabios” que durante la noche electoral nos anuncian que la elevada participación es un triunfo de la democracia) me dirán que la abstención es una actitud poco democrática. Pero a todos ellos les recordaré que, a diferencia de las dictaduras comunistas, en las democracias liberales el voto no es una obligación sino un derecho. El derecho a no estar de acuerdo con ninguna de las opciones. El derecho a decirle a esa clase política que incumple sistemáticamente todo lo que promete, que va a tener que hacer las cosas de otra manera si quiere ganarse mi voto.
Mi abstención no es una falta de interés por Europa."
Xavier Sala - La Vanguardia
Si le interesa, lea el artículo completo aquí
7 Comments:
Discrepo totalmente. No ir a votar es mantenerse al margen y no cumplir con un deber ciudadano. No es una obligación pero sí un derecho y un deber.
Para manifestar el desencanto está el voto en blanco.
No es tanto por el hecho de votar o no votar, que es una opcion personal de cada uno, sino que es interesante el artículo por la critica a todo el proceso de la convocatoria del referemdum y como se ha sustanciado.
Las prisas, la campaña en sí con el referendum plus, los carteles de Loquillo y Butragueño, y la utilización de Gran Hermano para informar a la gente.
La campaña desde todos los frentes para criticar al adversario político, más como una acto de precampaña electoral (en su caso vasca o gallega) que como un posicionamiento frente a la constitución.
Y que conste que soy un fervoroso europeista y que soy decididamente partidario del sí...pero de ahí a comulgar con ruedas de molino...
TOM
haciendo escuela (o facultad, llámenle como quieran) yo estoy con Mimón: para manifestar nuestro descontento con las diferentes posturas de los partidos políticas está el voto en blanco.Ése gran desconocido.Si es que ahí se ve la incultura política del país: no me gustan las campañas, no me entero de lo que hay que votar, no sé lo que dice la Constitución europea, pero sólo por joder no voy a votar, o voto lo que oigo por ahí que debería votar...y después dónde está la legitimidad de mi futura queja? porque esa la habrá seguro...si es que...se necesita más educación política!
Desde luego, la legitimidad de tu queja es la misma vayas a votar, no vayas, votes si o votes no.
La legitimidad de tu queja te la otorga tu condicion de ciudadano, no lo de haber votado. Y eso no solo en el referendum, sino en cualquier elección.
Sí pero...
La legitimidad para quejarte no te la da el voto, entre otras cosas porque cuando reclamas lo que sea nadie te pregunta si votaste o no. Pero no votar en una democracia tan poco participativa como la española es minusvalorar un sistema que nos dimos todos no participando. No entiendo los que se llenan la boca hablando de democracia, de constitución y la hostia, y luego quejarse de que nos llevan demasiado a las urnas. ¡Manda cojones! ¡Si votar no lleva más de cinco minutos!
Votar significa "creo en este sistema" aunque sea mejorable (o no), y no votar es "no creo en este sistema y no participo".
Me refiero a las quejas contra cómo lo hacen los que gobiernan...si yo no he votado,no he participado, ¿en qué fundamento mi queja?, soy libre de hacerlo contra todo y todos, pero no tendrá ninguna "consistencia moral", aunque no me guste la expresión.
Pues eso, si no participo, he de ser consecuente y no participar de nada, ni siquiera de las reclamaciones.
Yo lo creo asín.
Publicar un comentario
<< Home