Se va Carly Fiorina
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Carly Fiorina era hasta hace unas horas la presidenta y consejera delegada de Hewlett Packard. Y digo hasta hace unas horas porque hoy por la mañana se ha anunciado por diferentes medios que ha presentado su dimisión al consejo de administración. Otras versiones anuncian que ha sido cesada.
La noticia no tendría mayor trascendecia si no fuese porque esta mujer, considerada por muchos como la ejecutiva más influyente del mundo, rompió moldes al ser contratada por HP en 1999 procedente de Lucent Technologies para dirigir la difícil digestión que le esperaba a la compañía californiana al haberse fusionado (¿más una absorción que una fusión?) con la tejana Compaq. En ese momento el fruto de la fusión peleaba con Dell el liderato en la venta de ordenadores personales a nivel mundial.
Una mujer dirigiendo los destinos de una de las empresas estandartes del siglo XXI. A ver si ZP se entera: el talento está reñido con las cuotas femeninas.
Los cínicos reirán y harán chistes sobre cómo celebra el mercado que una empresa despida a una mujer como jefa.
Se va Carly Fiorina, la mujer que se levantaba a las cinco de la mañana para ir a correr antes de ir a la oficina. Siempre nos quedará Sallie Krawcheck.
Carly Fiorina era hasta hace unas horas la presidenta y consejera delegada de Hewlett Packard. Y digo hasta hace unas horas porque hoy por la mañana se ha anunciado por diferentes medios que ha presentado su dimisión al consejo de administración. Otras versiones anuncian que ha sido cesada.
La noticia no tendría mayor trascendecia si no fuese porque esta mujer, considerada por muchos como la ejecutiva más influyente del mundo, rompió moldes al ser contratada por HP en 1999 procedente de Lucent Technologies para dirigir la difícil digestión que le esperaba a la compañía californiana al haberse fusionado (¿más una absorción que una fusión?) con la tejana Compaq. En ese momento el fruto de la fusión peleaba con Dell el liderato en la venta de ordenadores personales a nivel mundial.
Una mujer dirigiendo los destinos de una de las empresas estandartes del siglo XXI. A ver si ZP se entera: el talento está reñido con las cuotas femeninas.
Los cínicos reirán y harán chistes sobre cómo celebra el mercado que una empresa despida a una mujer como jefa.
Se va Carly Fiorina, la mujer que se levantaba a las cinco de la mañana para ir a correr antes de ir a la oficina. Siempre nos quedará Sallie Krawcheck.
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